"Genial. He estado tanto en la Puerta del Sol de Castellón como en la de Oropesa, y ambos han cumplido las expectativas, que eran altas. Las dos salas están decoradas con un gusto exquisito, lo que las hace muy agradables. Probé el arroz de senyoret, que estaba muy sabroso. Las coquinas de entrada, las tostadas sobrantes y los camarones. Todo estaba delicioso; se nota la calidad de la materia prima y cuidan todos los detalles. Incluso el pan con tomate y el alioli eran más ricos de lo habitual. En el día de Castellón, la casa tuvo la amabilidad de obsequiarnos con una acuarela de una flor. La Oropesa es ideal en verano, con unas vistas al mar preciosas. La atención de los camareros fue excelente. En resumen, un 10. El de Oropesa se adaptó a la familia que vino de Madrid y todo pareció un éxito."