"Hemos visitado este restaurante local muchas veces a lo largo de los años, normalmente vamos en un grupo de al menos dieciséis personas, se recomienda reservar ya que es un lugar muy popular entre los lugareños, para la una de la tarde suele estar lleno hasta arriba, cuentan con una zona interior con aire acondicionado donde los trabajadores locales suelen sentarse y una zona exterior, ahora con un techo cubierto de viñas, muy rural español. No esperes un menú a la carta, aquí todo es catalán, ahora con una o dos camareras del este de Europa es más fácil entender el menú ya que el propietario y la mayoría del personal no hablan inglés, pero con un poco de español roto entre nosotros siempre nos las arreglamos y aprecian que lo intentemos. El menú del día son once euros e incluye una comida de cinco platos y un litro de vino entre dos personas, los platos son básicos y variados, si eres un comensal exigente, esto no es para ti, es comida típica catalana, pero extremadamente buena, sus garbanzos al ajo son insuperables, café al final con brandy si lo deseas. Sí, 11 euros por persona, una experiencia catalana maravillosa."