"Helados muy muy ricos, helados artesanales de quitarte el hipo. Ese podría ser el titular, el caso es que, si estás en San José, tienes que pasarte por la plaza y hacer una parada en esta heladería. Lo primero que llama la atención al llegar es que hay muchas personas esperando a ser atendidas. Podría parecer un caos, pero no. Solo tienes que coger número, como en el mercado, y esperar tu turno. Según te aproximas y te adentras en este pequeño establecimiento, te topas con el mostrador. Soy incapaz de decir el número de sabores que allí había, pero son muchos y variados. El precio más bajo son 3€. La verdad, los helados son baratos para la calidad que ofrecen. Sin embargo, los batidos se suben un poco a la parra. Son 5€. Pero están de vicio, merece la pena probarlos. Por último, en la puerta de la heladería, puedes encontrar dos bebederos de agua grandes para mascotas."