"Después de pre avisar previamente por teléfono de que llevamos una mascota (perro de 3 kg) y una vez llegado al sitio, nos hicieron esperar un poco en la puerta, con nuestra mascota. Tras un rato sin que nadie nos diga nada, y habiéndole dicho al llegar que somos dos y una mascota nos dice que pasemos (entramos con nuestra mascota en brazos, claramente visible). Nos sienta en la mesa y tras pasar un rato sentados, el mismo hombre con el que estuvimos hablando y nos atendió para sentarnos, llega con cara de enfado y nos dice que no podemos estar denteo con el perro. Nos lo dijo de tal forma que pensaba que era broma ya que llevábamos un rato pensando que eran conscientes de que llevábamos mascota. Tras haber un poco de tensión y ofrecernos comer fuera, nos decidimos marchar ya que no nos sentimos agusto. En ningún momento nos escuchó desde la llamada telefónica."