"La habitación de matrimonio estuvo bien, aunque el sonido del baño se escuchaba en la habitación contigua, y la persona que se hospedaba al lado podía escuchar absolutamente todo lo que allí sucedía. Sin embargo, la habitación individual fue bastante mala. La cama era incómoda, el baño diminuto, casi no se podía acceder a la ducha, y el lavabo era sumamente pequeño. La persiana estaba rota y la calefacción casi no funcionaba; apenas calentaba la habitación, y en enero se pasa frío, lo cual fue desagradable. Vale la pena pagar 5€ más por tener una habitación doble. La recepcionista estaba más ocupada en asuntos personales que en atendernos. Fue muy amable, eso sí, pero nos hizo falta que nos atendiera correctamente y nos explicara lo que necesitábamos saber sobre la puerta y otros temas. Pagamos con tarjeta y al día siguiente, sobre su mostrador, a la vista de cualquiera que pasara por allí, estaba el papel del datáfono con todos mis datos. Algo que me pareció sumamente grave. No adjunto la foto que hice por cuestiones de protección de datos."