"Le doy una estrella porque el local es muy bonito, la carne mechada es buena y de precio, asequible, pero ahí se acaba lo positivo. Desde el momento cero, nos atiende una camarera muy desagradable que, a cualquier petición que hacemos, nos deniega. Somos 13 personas, por lo que cogemos una mesa grande que hay al fondo y preguntamos si podemos ocupar otra y nos dice que si hubiéramos avisado, si, pero que como hemos entrado directamente, no. Disculpe usted señora por no ha avisar de que venimos del funeral de mi abuela. Y así todo: le pedimos agua, nos dice que no, que la cojamos nosotros. Le pido alguna opción que no sea una tostada (porque no puedo tomar pan) y me dice que no, que hasta la 1 no abre cocina y no me puede poner nada (son las 12 y me hubiera bastado con cualquier cosa). Mi pareja le pide un extra de tomate triturado (la cantidad muy escasa para la tostada) y le dice que no. El jamón de baja calidad y mal cortado, y el pan, mal tostado en más de la mitad de los desayunos. Y ya por último, 12:36 p.m.: “familia, tenéis que iros porque tengo que preparar las mesas para las 13:00” En fin, puede que hayamos tenido mala suerte porque no somos habituales pero, un buen servicio o al menos, amabilidad, son importantes de cara al público, sobre todo, porque no sabes por qué situación está pasando la persona a la que atiendes como ha sido nuestro caso."