"Fuimos al restaurante con mucha ilusión y expectativas, ya que habíamos estado varias veces en Lalola. Todo iba como esperábamos, la gambas al ajillo espectaculares, el arroz de temporada muy bueno, pero cuando llegó el lomo de gamo, lo sirvieron medio crudo, lo cual una vez que el plato estaba en la mesa muy bien presentado fue cuando nos dijeron que la carne se servía así pero que si lo queríamos más hecho no había problema. Les dijimos que preferíamos la carne más cocida, y para nuestra sorpresa nos sirvieron un plato con el lomo literalmente quemado y desmenuzado y sin ninguna presentación, por supuesto lo devolvimos. Luego trajeron al encargado del salón un plato diciendo que si ahora estaba bien, pero nuestra sorpresa fue que no eran lomos, eran literalmente cuatro trozos de carne de mala calidad y sin presentación, al no estar satisfechos lo devolvimos. La única persona que se disculpó fue el camarero muy amablemente y nos sirvió una copa de vino como disculpa y le agradecimos, aunque el vino no nos cayó bien porque normalmente bebemos agua. Eso no es típico del chef Javier Abascal. Volveré, pero me tomaré mi tiempo. Me ha decepcionado mucho, y eso que soy chef en el local."