"Un bar restaurante completamente nuevo y con un toque muy sofisticado. Ubicado frente a la iglesia de Santa María de Caná (la más grande y destacada de Pozuelo), es un lugar muy agradable, con una decoración que ayuda a sentirse relajado y unos platos, por ahora, bastante elaborados. El que pedí específicamente, huevos rotos con foie y nueces, estaba delicioso. Tardaron un poco en traerlo, pero supongo que eso se debe a que estaba fresco. Los camareros son muchos y educados, aunque no puedo decir que sean amables, ya que no preguntaron si el plato me había gustado. Hasta ahora no he cenado ni comido, pero como se puede ver en una de las fotos, el menú por 12,50 es muy bueno. Por último, el que tiene terraza en otoño, cuenta con una estufa muy moderna. Volveré a cenar y cantaré para ustedes."