"En el corazón del barrio malayo está esta cafetería, del estilo de todos los que se encuentran en esa zona pero original en sí mismo, ya que todos los demás es un lugar muy cuco, lleno de flores, con paredes, suelos y muebles dignos de una serie americana de los años 60. pero la decoración no es lo único que merece admirar lolina tiene dos habitaciones, la planta superior, llena de luz y colores, la barra y enormes ventanas que dan a la calle. y el piso inferior, oscuro, iluminado con luz tenue y lleno de sillones, cada uno diferente en esta cafetería animada que podemos encontrar de batidos naturales, té, cafés, pasteles, pasteles, brownies y jugos a ensaladas, perros calientes, cócteles y tazas que merecen la pena visitar, ¡pero cuidado! siempre está arriba"