"Durante nuestro paseo por la ciudad, mi esposo y yo tropezamos con este restaurante. Tenían mesas al aire libre, con desinfectante de manos proporcionado ya que practican seguridad con respecto al coronavirus. Había mucho bullicio español alrededor, hablando y comiendo. Fue un entorno maravilloso. El menú en la pared, lo tradujimos usando Google Translate y el camarero hizo todo lo posible para explicar los platos. Fue MUY agradable, con un servicio con una sonrisa. Tomamos vino, cerveza y tapas a precios maravillosos. La comida estaba extremadamente sabrosa. 3 tapas por persona hacen una cena razonable. No hay baños pertenecientes al restaurante. ¡Volvimos al día siguiente para almorzar - a probar más tapas y nos recibieron cálidamente. Gracias por el servicio. ¡Recomendado!"
