"Fuimos ayer mediodía. Domingo. Reservamos, apenas dos horas antes y claro, ya no tenían mesas en la terraza frente al mar, estuvimos dentro, sin vistas pero muy fresquitos. Comimos una paella de mariscos mortal, riquísima, con un sabor de el punto del arroz de y una cantidad y calidad de mariscos, de El personal iba a tope, restaurante lleno, pero muy bien todo: muy atentos y simpáticos pese al stress. Pasaban unos barcos de mariscada, bandejas con chuletones y pescados a la brasa...mmm que eran de cine. Normal que esté lleno, y sobre todo de familias locales, de toda la vida.. Muy recomendable. Acierto seguro. La próxima,reservaremos con tiempo para también poder disfrutar de las vistas. Gracias a todos, fue un comida deliciosa"