"Desde el principio fue todo un desastre. Llegamos y nos sentamos en la terraza, mientras que el otro amigo se quedó en el comedor. Tuvimos que esperar 25 minutos hasta que salí a llamar la atención porque no había cobertura y vi a mi amigo sentado; no habían anotado que ya estábamos dentro. La organización de la cocina y los camareros fue muy mala, iban preguntando mesa por mesa a qué mesa pertenecía cada plato que traían. Entre un plato y otro pasaba mucho tiempo. En general, fue un desastre total. Es la primera vez que nos pasa algo así y, para colmo, se acercaron a la mesa para hacer la cuenta porque no sabían qué habíamos pedido."