"uno de los aspectos que nos cautivarán de la isla es, sin duda, la belleza de su paisaje rural. Ese entorno natural privilegiado se vuelve aún más mágico, si también tenemos la posibilidad de compartirlo, entre mantels, en una casa tradicional menorquina en la profunda tranquilidad que nos ofrece su terraza, seremos capaces de apreciar cómo los aromas del campo se funden con la sugestiva cocina que el chef nos propone. En resumen, la mejor manera de rendir homenaje a esos sentidos. mediodía, variedad de tapas y cena a la carta"