"Ya caminé por la calle por la tarde y vi que la terraza estaba llena. Entonces después busqué en Google y por la noche fui a BACAO porque estaba muy bien considerado. Una vez que llegamos cometimos un error en el nombre. Y así cenamos en el Bar Cuesta del Bacalao. Todas las mesas vacías y más lejos todas las terrazas llenas. Pero seamos honestos, ¡la comida estaba deliciosa! ¡Paella súper fresca! El servicio fue amable y relajado. En definitiva, pasamos una velada maravillosa, lejos de todo el ajetreo y el bullicio. También luce genial por dentro."