"Local típico de comida rápida, aunque de rápida solo tiene el nombre. ¡30 minutos de reloj esperando un burrito, 30! La dependienta no parece preocuparse en absoluto; es impresionante la lentitud con la que gestiona los pedidos y prepara las bandejas. Si tienes un poco de prisa, lo mejor es que busques otro lugar para cenar. En definitiva, deberían contar con personal mejor cualificado o no aceptar más pedidos de los que puedan manejar."