"El sitio es agradable y la comida está bastante bien, en nuestro caso: los entrantes muy ricos (huevos rotos y ensalada de pimientos) y la carne de buena calidad, sin embargo, los postres fueron mejorables... una tarta de limón muy amarga y la de queso muy hecha. Quizás los precios un poco altos, eramos 4 y salimos a 50 euros por persona con una sola botella de vino (la guarnición la cobran a parte, 5 euros por un platito de patatas fritas)"