"Pasábamos por el centro de Madrid y descubrimos un cartel con un menú, 11,50€. Sin demasiada expectativa entramos a matar el hambre y, oh sorpresa, encuentras un local pequeñito, bien atendido y en el que nos dieron de comer con rapidez y con bastante calidad. Pedimos raviolis con pesto, crema de calabaza, emperador a la plancha y solomillo a la pimienta, todo rico y en cantidad aceptable. Por poner un pequeño pero, el relleno de los raviolis le faltaba un poquito de cocción. De postre flan de coco, buenísimo, y yogur con arándanos. Todo bien por donde quiera que lo mires. Y por un precio adecuadisimo."