"Hacía mucho tiempo que no comía en este restaurante y lo recordaba peor, pero me llevé una grata sorpresa. La única pega es que tardaron en llegar las pizzas un buen rato. De todas formas, estaba el restaurante hasta arriba y era semana del El Pilar. Nada que objetar. Pedimos de entrante la ensalada con burrata y el provolone. Todo muy rico. De segundo, elegimos 3 pizzas para 4 y quedamos bien. Muy buenas, finas y con un tamaño adecuado. Los trozos que sobraron nos lo metieron en un táper. El trato de la camarera estupendo, muy atenta en todo momento. La situación del local es inmejorable y en la terraza se estaba de maravilla. Sitio muy recomendable."