"Acabo de encontrar mi reseña de 2017 en la que decía que nunca volveríamos a visitar este restaurante, sin embargo, después de pasar unas horas agradables en la playa de Portixol hoy, pensamos 'oh, parece bonito, ¡vamos a darle otra oportunidad!' ¡Exactamente lo mismo esta vez, excepto que no vimos a un camarero sonarse la nariz en la mano! ¡El servicio es espantoso... de verdad! Esperamos tanto tiempo por las bebidas, no pudimos conseguir condimentos, pedimos una ración de gambas, ¡pero llegaron en 5 minutos... ¿eh? ¿recalentadas? Bastante terribles... apenas tibias... preocupante. Casi rogando por un servicio... Nos fuimos apresuradamente... no vayan."