"He ido tres veces casi pro costumbre pero la verdad no repetiría, y recomendaría probar otros en su lugar. Tampoco va a ser un desastre, pero psché. Almejas regulares, paella decente. Probamos también la sepia que nos dejó indiferentes. Salimos a casi euros por persona, lo que bebiendo cervezas (y unido a lo anterior) es muy caro para el sitio. Todos los precios están inflados, de hecho creo que la carta va sin IVA con lo que ya empieza complicado. El local es realmente grande con multitud de salas y espacios diferentes, algunos más acogedores y otros menos. Los baños dejan bastante que desear. En definitiva, puedes ir a comer pero es un sitio “de batalla” subido de precio."