"Nuestra visita a Goikar nos dejó con experiencias buenas y malas. Lo bueno: el servicio fue bueno, con una amplia presentación del menú. Comida bien preparada y servida. Lo malo: el servicio fue lento a pesar de que éramos los únicos clientes en el lugar. La cubierta no estaba bien lavada, hasta que pude ver restos de comida. Las albóndigas de verduras estaban congeladas por dentro, encontramos un trozo de plástico en la crema catalana y había restos de comida debajo de la mesa. Pero lo peor fue que nos sentimos engañados al recibir la cuenta: resultó ser 25 euros por persona, cuando solíamos pagar 15 euros por el mismo nivel de comida en el País Vasco. De las cosas inesperadas en la cuenta, lo más difícil fue el cargo de tres entradas, cuando habíamos pedido una. De todos modos, puedes encontrar una multitud de buenos restaurantes con opciones veganas en Bilbao, te recomendamos saltar a Goikar."