"Si decides probar las croquetas, ¡definitivamente tienes que venir! El lugar no parece muy grande, pero hay bastante espacio dentro y es muy luminoso. Tienes la opción de llevar a casa, con el tamaño de la bolita o el cromito, y para llevar, solo está disponible el tamaño grande. Hay diferentes variedades de croquetas, la mayoría de sabores que no son comunes o que no suelen prepararse en casa. En cuanto a la relación precio-valor, un cromito a 2.40 puede parecer caro, pero la verdad es que son bastante grandes y contundentes, ¡y están deliciosos! El servicio es excelente, te atienden con mucha amabilidad y explican el funcionamiento del lugar, además de servirte en la mesa."