"Debería haberlo sabido al entrar, estaba vacío mientras otros restaurantes estaban llenos. Un amigo de Escocia me lo recomendó. Mi amigo pidió su curry de pollo y yo pedí un Bhuna de cordero. Me trajeron un Bhuna de pollo; lo señalé, pero el camarero insistió en que yo había pedido pollo, a pesar de que mi amigo estuvo de acuerdo conmigo. Decidí comerlo ya que ambos teníamos hambre. El mío carecía de cualquier sabor picante y se lo mencioné, estaba muy soso; me dieron un bol de salsa madras para mezclar. Totalmente inaceptable. El plato de mi amigo estaba bien, así que decidí no causar una escena ya que él me invitaba. Mi amigo pagó la cuenta y nos fuimos. Expresé mi opinión al salir. No hace falta decir que no volveré a visitar ese establecimiento."