"Llegamos y, a la entrada del restaurante, una señora muy amable nos recibió y nos llevó a la mesa. El maitre, muy simpático (malagueño), vino a tomar nuestra nota. La comida fue espectacular; probamos un poco de boletus con un huevo excelente y unos pimientos al pil pil que merecen un premio. Como plato principal, pedimos un besugo a la espectacular pansa, ¡es un manjar! Y para terminar, su queso fue una delicia. En conclusión, fue una experiencia fantástica."