"Hotel encantador, super acogedor, muy bien ubicado, tranquilo y que cuida a sus clientes como si fueran de la familia pero dejándote tu privacidad. He pasado un finde con mi marido perfecto, no se puede pedir más. Habitacion limpísima, amplia, cama con dosel precioso, colchones comodísimos y muy grande, insonorización total solo se oye el silencio y los pájaros por la mañana, nuestro descanso ha sido total, el baño espacioso y con todo tipo de detalles para aseo y baño que no sueles tener en todos los sitios, detalles que marcan la diferencia. Mucha limpieza por todo el hotel. De la cena no sé ni por dónde empezar, estaba todo riquísimo, dejamos los platos limpios. Productos de mucha calidad y con mucha elaboración da como resultado la cocina de Ángel, mucho cariño y mucha dedicación sin escatimar en gastos para elaborar los productos de cercanía y como digo de mucha calidad. El desayuno ha sido el más bueno y sano que he comido en ningún hotel, todo natural, de elaboración propia, la misma línea que la cena. Todo esto unido a la profesionalidad y el saber estar de Reiner y Ángel hace que la estancia sea inmejorable. Volveré seguro, con eso lo digo todo. Tenéis un hotel que se hace inolvidable. Un abrazo muy fuerte a los dos."
