"Mi esposa y yo estábamos buscando un restaurante para cenar. Estábamos teniendo un problema. Parece que los dos lugares que habíamos elegido para cenar estaban cerrados por vacaciones. Y algunos otros lugares estaban completamente reservados para la noche. Así que decidimos dar un paseo y esperar lo mejor. Tuvimos una suerte increíble al descubrir este lugar en una pequeña calle muy concurrida y llena de restaurantes. Las mesas exteriores estaban todas ocupadas, así que nos vimos obligados a entrar. Esto funcionó, el servicio fue muy amable y servicial. La comida estaba excelente. Pedimos berberechos y vieiras frescas con un maravilloso vino verde español, todo esto a un precio maravilloso."