"Es una lástima ver la decadencia en este restaurante. Como se puede apreciar en las fotografías y comparando con la actualidad, el local ha empeorado mucho y ha perdido gran parte de su encanto. La limpieza deja mucho que desear, con muchas áreas sin protección contra los gérmenes, y los baños necesitan una renovación urgente. A pesar de esto, los zumos y la comida se preparan con cuidado y tienen un buen sabor y calidad. El servicio es amable y atento. Sería bueno que la dirección invirtiera en una restauración para devolverle algo de su brillo anterior con una capa de pintura y una buena limpieza a fondo."