"Fui a comer la otra noche. El lugar parece un largo pasillo con muchas mesas a ambos lados. El lugar estaba lleno de adolescentes disfrutando de sus pizzas/papas fritas. Sin embargo, el concepto de 'servicio' es interesante, te sientas, encuentras el número de mesa y vas al mostrador principal para pasar tu orden. El camarero era amable y hablaba inglés. La comida estaba correcta considerando que la cuenta total costaba menos de 15€. Si no estás buscando comida tipo 'Michelín' con un presupuesto limitado, este lugar cumplirá con tus expectativas."