"Lo que la ira me da no poder valorar un lugar no vegetariano que ofrece platos veganos, con lo difícil que es encontrar lugares que tienen algo más allá de las verduras a la parrilla y la hamburguesa más allá. En el kasko probamos las croquetas podridas: de una gran textura, de un precio inmejorable (8 croquetas 8 euros). que sí, eran llagas y el bechamel tenía algún sabor a harina sin hacer. Quiero pensar que fue una coincidencia del día. ¡Tienen más platos, incluso postre! Tenían buen aspecto pero no lo intentamos."