"La calidad de los productos no coincide con los precios cobrados en este restaurante. El pulpo y camarón en la ensalada carecían de sabor, mientras que la tarta de atún, aunque bien sazonada, no alcanzaba a compensar la decepción de la mala calidad de los ingredientes. Pagar 125€ por dos personas en un lugar con productos tan poco satisfactorios resulta una situación muy desalentadora."