"Mi experiencia en este restaurante fue decepcionante. Soy local y suelo ir con mis amigos a diferentes tipos de restaurantes en la isla y nunca había tenido una experiencia así. La mayoría de los empleados solo podían hablar inglés y no hacían ningún esfuerzo por hablar en español, que junto con el catalán, es la lengua oficial de nuestra isla. Después de algunos intentos logramos conseguir a una camarera que podía hablar español y fue muy amable. Por otro lado, el menú estaba solo en inglés. Aunque la comida estaba aceptable, la relación calidad precio no fue suficiente, demasiado caro para lo que era. A pesar de que la ubicación es hermosa, el cambio climático deja mucho que desear."