"Restaurante especializado en comida sudafricana, ubicado en un precioso entorno, a los pies del castillo de la Mota, que cuenta con salón interior muy luminoso, una terraza con preciosas vistas y parking para los clientes. Su carta no es muy amplia, pero es variada, ofreciéndonos solo los domingos un plato especial: el Asado del domingo. La clientela es fundamentalmente de habla inglesa; de hecho, durante nuestra visita éramos los únicos españoles. La atención, buena. Nos decidimos por el potje de ternera, guiso tradicional sudafricano en olla de hierro fundido, y pollo salteado. Con un refresco y una cerveza, la cuenta fue de 30,50 € para dos personas. En general, muy bien, el sitio es muy bonito y las vistas fantásticas, y en cuanto a la comida, buena, aunque sin llegar a entusiasmar. Vale la pena hacerle una visita."