"Un lugar pequeño pero muy bien atendido. Las sugerencias que hicieron fueron excelentes. Las gyozas de pollo con una salsa picante estaban deliciosas, con un poco más de carne. El tigre tempura, al igual que las patatas bravas, fue muy recomendable. Pero lo mejor fueron los nigiris, tanto los de barrabaño como los de salmón; estaban riquísimos, aunque repetimos con los de salmón, que estaban altamente recomendados con un toque cítrico de mostaza. ¡Definitivamente volvaremos!"