"El restaurante nos fue recomendado por nuestro anfitrión de Airbnb y no nos decepcionó. A pesar de estar en un país diferente, pudimos disfrutar de excelentes rolls japoneses y pad Thai, que estamos acostumbrados a comer en Canadá. Hicimos una reserva para la noche de San Valentín y el restaurante estaba lleno. La camarera estaba sola atendiendo todas las llamadas de los clientes. A pesar de la barrera del idioma (de nuestra parte), recibimos lo que ordenamos y disfrutamos de nuestra comida."