"Se trata de un local decorado con elegancia y aspiraciones suntuosas.Presenta una amplia carta donde degustar los clásicos platos asiáticos y alguno que otro de corte clásico mediterráneo.Los platos no son abundantes por lo que tuvimos que encargar una segunda comanda. Empezamos con unos Crépes de pato, fríos, sabor neutro, no los pidas! Continuamos con unas Gyozas de pollo y verdura, nada espectacular. Luego un Sushiroll de salmón y aguacate, lo más rico. En este punto seguíamos con hambre, así que llegó un Tartar de atún, rico pero la textura del atún muy regular, tan picado que parecía puré. Finalmente terminamos con un Arroz frito con gambas, he comido arroces del chino de la esquina mil veces mejor que este. De postre unas mochis variados. Visto lo visto la comida no es el punto fuerte.Lo mejor el trato, exquisito por parte de todo el personal, nos agasajaron con un chupito de Sorgo. Muy muy bien y es lo que hace que suba la valoración a normalPrecios adecuados."