"Estábamos en el restaurante y estamos situados en la segunda planta del hotel. Vinimos después de leer las opiniones y porque podíamos pagar parte de la cuenta con yums (el tenedor) nos coloca en una mesa delante del cristal con vistas inmejorables de la gran manera. Te sirven con un bocadillo de pulpo al vinagre que me tiene mucho. Este detalle siempre es apreciado. Pedimos que empezaran algunas croquetas, eran muy buenas, cremosas y con grandes rebanadas de jamón. Repito. de los platos principales tomé el entrecot que era muy bueno de sabor y en su punto. Vine con dos salsas (que no puedes cambiar) una salsa picante y otra carne que conocí a los que tenían concentrado de carne. Nada bueno estaba pasando con el entrecot. Habría preferido una salsa de crema, roquefort, pimienta o hongos. Con esto, no falla. También pedimos carrilles, no soy muy fan, pero tengo que decir que eran ricos y súper tiernos. Tal vez la batata le dio al plato demasiada dulzura. Finalmente tomamos la torta de queso que era lo que más freí la comida. No fue malo, pero no repetir. la cuenta final fue de 49 euros (dependiendo de 25 que fueron pagados con yums.) es algo que falta pero dado el lugar y el buen servicio Entiendo que estos precios son."