"Sitio pintoresco en zona tursitica cercano a la torre del oro. El servicio está realizado por gente joven con mas afan por agradar que experiencia sirviendo. La calidad de la comida es mala: timbarl de verduras con verduras aburridas y mala presencia. Tartar de presa iberica con mala presencia, sin sabor alguno a ibérico que ademas estaba camuflado con zumo de naranja, y precio desorbitado para la cantidad. Pero sobre todo, lo que peor puntúo es la falta de limpieza: el local tiene telarañas, muuuuuchhas moscas, suelo sucio, paredes sin pintar, desorganizado,...De esta manera no apetece comer porque ya uno piensa que la fakta de higiene tambien está en la cocina. Lástima por el interés que ponen los chavales por servir."