"El restaurante está dentro de un hermoso hotel. Fuimos a celebrar el cumpleaños. Habíamos reservado y aunque reservamos a una hora muy temprana y el restaurante estaba prácticamente vacío (sólo había un grupo de 4 niñas y en otra mesa una pareja), nos pusieron al lado de la puerta que da entrada a la cocina. esa puerta cada vez que la cruzaron, estaba en contra del marco de la puerta, estando enfadada al final los fuertes golpes de la puerta. (con referencia a la tranquilidad del local, donde sólo la cubertería y la gente puede hablar) la relación alimentaria calidad/precio parecía un poco desorbitante. los calamares eran buenos (aunque los he probado en otros restaurantes de menor precio y mejor). aunque destacando que las perlas cítricas le dieron un toque muy interesante. Las papas eran muy buenas y la salsa también era buena. Pero en cuanto a los dedos de pollo estilo thai. era una extraña combinación de sabores y la mayonesa no sabía mucho sobre el curry rojo. El pollo estaba seco y denso y el rebote era muy duro. entre plato y plato tomó mucho tiempo. Pedimos cortar y terminamos comiendo platos por plato. la gracia y lo dijimos (queríamos que todo o más o menos se unieran) el postre para decir que era muy pero muy bueno. 100% recomendado."
