"No vamos a ir a restaurantes indios, pero esta vez nos ha hecho repensar. los sabores y, especialmente, el tratamiento nos proporcionó una cena personalizada: variada y especiada según el grado de tolerancia de cada uno. el papadum y las combinaciones juego con las salsas de mango, la salsa de menta (exquisita, por cierto) y la cebolla incurtida hicieron la espera más que amen. los diferentes naan muy bien integrado los ingredientes con la masa. la entrada nos dio una de cal y otra de arena porque notamos la pakora de pollo un poco seca. los tazones de comida, pollo, cordero y arroz, eran de un gusto muy agradable, diferente de uno al otro aunque algo escaso, tal vez porque uno lo compara con las raciones de otros tipos de restaurantes como el chino. el precio, comparando de nuevo con los restaurantes chinos, un poco elevado por la cantidad que sirves pero supongo que pagas por el género y el gusto. una cena muy buena que nos hace repensar la inclusión de la comida india en nuestros posibles planes futuros"