"El local es precioso, el servicio muy correcto. El pulpo a la brasa bien, pero con un exceso de sabor ahumado, lo que me hace sospechar que muy natural no ha sido el proceso. Pero lo peor ha sido el T-bon steak; me esfuerzo en dejar claro que como máximo al punto, pues nada, pasadísimo. Un plato de 30 euros. Al pagar lo digo y, vale, se lo diré al cocinero… Este local, hace unos años era impresionante. Ha cambiado mucho."