"Ls comida un 10, el mero a la brasa estaba de muerte. Las navajas también y el canelón muy sabroso. Tanto la tarta de queso como la piña con jengibre y helado de pistacho de postre nos gustaron mucho. La única pega la lentitud en el servicio, sobre todo para traer las bebidas, tuvimos que pedirlas hasta en 3 ocasiones… pero mereció la pena. El ambiente de la sala relajado y buena temperatura. Recomendable"