"emblemática taberna gallega de la zona, buena ubicación, accesibilidad con carrito pequeño, silla de ruedas olvidar, tablas menos juntas que hace 3 años. No teníamos reserva y esperábamos alrededor de 15mn hasta que nos dieron una mesa, el problema es que tomó unos 40mn hasta que nos sirvieron. el personal amable, poca atención y cuando salen los platos, todos te siguen como el doble paso en una mesa de 50x50. comimos almejas, pulpo, chipirones y pimientos de paddle, todo estaba bien. Bonita carta, buen precio. punto para mejorar, un poco de atención y que la espera para servirle no es tan larga. Bueno, ya puedes pagar con tarjeta."