"Un restaurante clásico donde disfrutar de una buena cocina italiana de mariscos y pescados. El look old stile, tiene un toque kitch de restaurante italiano clásico pero también se ve un poco demodé. Le viene haciendo falta una puesta a punto, un poco más actualizada aunque sin perder su esencia. La comida me pareció deliciosa, ente los que cabe destacar: el atún con rúcula y Cheries que estaba sublime, sabroso y una materia prima de primera. Las albóndigas de pescado también muy finas. la pasta (spaghetti) con erizo de mar fuera de carta delicioso y cremoso. Un bocado de placer! la parrillada de mariscos: gambas, cigalas y almejas eran frescos y al punto de grillia. la fritura estaba muy bien hecha y nada grasienta, pero el 50% del plato era calabacín frito y no pescado. solo habían calamares y boquerones. Me sobró tanto calabacín y me faltó más variedad de pescados! Los postre tiramisú, tarta de queso y tarta de manzana están correctos pero no nos volvieron loco. El servicio y el personal son estupendos. Personas profesionales que conocen su oficio y se ve que les gustan y disfrutan de su trabajo. Nos atendieron de 10. Es uno de los motivos por los que siempre volvemos calidad de alimentos y calidad profesional. A mejor (siempre constructivamente) una actualización del local."