"Hemos llegado pronto un domingo y aunque no teníamos reserva nos han dado una mesa muy amablemente. Decir que sobre las 14:30 estaba lleno. Nos iban a poner al fondo pero al notar que el olor que subía de los baños era más que desagradable, les hemos pedido que nos sentaran junto a la ventana y lo han hecho sin problemas. Hemos pedido unas patatas bravas y burrata de entrantes, normales, no lo recordaremos en dos días, de segundo hemos pedido ambos el bacalao, es un plato de bacalao con tomate clásico. En fin, resulta un menú (lo llaman premium) por unos 19 euros que puede pasar por un menú de diario de cualquier restaurante, el definirlo como premium no es adecuado por lo que ofrecen. De postre el tim baon bastante rico y la tarta de queso se hace pesada puesto que la ración es muy grande. En definitiva restaurante correcto ya que 19 euros es un precio justo para la calidad de lo que ofrecen en ese menú, ahora bien desde fuera viendo como están montadas las mesas da la sensación de que es un mejor restaurante. Ahora lo que es desagradable es el olor de los baños y tuberías, sin duda algo que deben tratar"
