"Sabor a... Tostada de jamón con tomate y mucho aceite; a lomo, a queso de Burgos... Y para los días más dulces... A mantequilla y mermelada. Sabor a descanso en el trabajo, a un rato de charla con los compañeros, de risas, de silencios que denotan cierto cansancio, algún problema en la oficina, sueño, mucho sueño. El sueño se va con el café, fuerte, hecho a prueba de funcionarios y de vagos somnolientos. Nos vamos, volvemos al trabajo, con el estómago caliente y un insoportable olor a tabaco. Salimos mejor de lo que llegamos, reconfortados al saber que, al menos con la barriga llena, la montaña de trabajo que nos espera parece menos pesada."