"Habíamos leído en las reseñas que era un buen lugar para comer y decidimos probarlo. Lo primero negativo es el aparcamiento; hay que admitir que es una zona muy complicada para encontrar sitio. En cuanto a la comida, pedimos una parrillada para picar (chorizos criollos, mollejas y algo más) que estaba bastante buena, y pan con chimichurri, que me pareció normal. Luego, como plato principal, pedimos entraña y un entrecot; todo estaba rico, aunque a mí, personalmente, me sorprendió la escasa cantidad, ya que esperaba platos más abundantes. Para el postre, pedimos tiramisú, que estaba realmente delicioso. Todo esto, sumado a dos cervezas por persona, nos costó 34 euros, lo cual estaba dentro de lo esperado. Para nosotros, que somos de buen comer, las cantidades son algo justas. El personal es amable y rápido."