"El hotel es moderno y tiene muy buena ubicación. Lo que no me ha gustado es que la habitación tiene unos sensores de luz que no se pueden programar, por lo que si vas al baño durante la noche, la luz se enciende sola y a mi personalmente esto me molesta mucho, no me gusta enceder luces de noche, además que despierta a la otra persona que está también en la habitación. Es un hotel totalmente despersonalizado, no vimos a ni una persona, todo con códigos para entrar y salir. Solo hay 2 toallas grandes, ni toalla para el suelo ni para las manos. No hay nevera en la habitación (teníamos la king y en nuestro caso, tuvimos poca suerte porque había hormigas en la mesita de noche y parte del cabezal de la cama, me imagino que algún huésped dejaría comida en la mesita y no limpiaron bien. No lo se, pero nunca me había encontrado hormigas en una habitación de hotel... A parte, nos quedamos una noche de lunes (pagando igual que una de martes) y el restaurante y el bar estaban cerrados, por lo que tuvimos menos servicios pagando lo mismo. Así que me quedo con una sensación agridulce de haber pagado más de lo que vale, pero fue una decisión de última hora y no habían muchas más alternativas, sino, sin duda, miraría otras opciones."