"Fuimos aquí para el almuerzo de Navidad, no muchos lugares ofrecían almuerzo, así que pensé que los mendigos no pueden ser exigentes. NO 1) Saludado por un camarero fumando en la entrada 2) Se nos dio a elegir entre dos mesas ubicadas entre la cocina y el baño 3) Pedimos una botella de vino tinto de 20 euros (terrible como agua), en la factura decía que costaba 8.5 (preferiría haber tenido la botella de 20) 4) Entrada, verduras tempura (pasables), mini pizzas (malas) y una cosa viscosa que realmente sabía bien. 5) Platos principales, mi esposa pidió un risotto con mariscos, los mariscos estaban buenos pero con DEMASIADA sal, incomible. Yo tenía un filete con papas fritas, el filete debió haber salido directamente del congelador y las papas apenas habían visto la freidora. 6) Servicio, ****, ¡simplemente no querían estar allí! No me molesté con formalidades después de los platos principales, pagué la comida, no pedimos postre ni café y nos fuimos. El agua con gas era excelente."