"Fuimos a este restaurante esta noche como una familia de cuatro: dos adultos y dos niños. Mi esposa eligió un plato de pollo con arroz y salsa de champiñones. A mitad de la comida, cuando estaba comiendo el pollo, se dio cuenta de que la gran mayoría del pollo estaba crudo, no solo un poco poco hecho, sino claramente crudo. Esto nos desanimó a todos a seguir comiendo, especialmente a mi hijo pequeño que también pidió pechuga de pollo. Hablamos con un miembro del personal que mostró comprensión y se disculpó. Sentimos que no podíamos comer nuestros platos, así que pedimos la cuenta. Nos descontaron el cargo de la comida de mi esposa, pero aún así querían cobrarnos por las otras comidas a pesar de que la mayor parte de la comida no fue consumida. El gerente se acercó y justificó el pollo crudo diciendo que era porque el pollo era grueso, sin abordar realmente nuestras preocupaciones. Cuando cuestioné los cargos, el gerente agarró el recibo de manera brusca y se marchó enojado, causando una escena que no queríamos y que no estábamos buscando. No salimos buscando una comida gratis, pero servir pollo crudo es inaceptable y la forma en que el gerente manejó la situación fue poco profesional, lo que nos ha desanimado totalmente a volver. Es una pena, ya que el restaurante se ve encantador por la noche y el otro personal fue amable y profesional. Si decides ir, ¡asegúrate de que tu pollo esté bien cocido!"
