"Una vez más elegí la párra para cenar y tomar algunos amigos que no lo conocían. había una buena atmósfera y comida como siempre muy buena. Esta vez noté que el servicio no era como otras veces. Estaban distraídos e inconscientes. Pedí una copa de champán y el camarero la sirvió. Lo llamé porque el gusto era de cava, y me dijo que era el champán geograf y eso es un cava. Lo dejé, pero me cobraron como champán, 8€ como pone la cuenta. Probablemente fue un error de camarero y no debe haber ninguna intención equivocada. Ruego a la propiedad que enseñe el servicio la diferencia entre un origen y otro. De todos modos, aún iré a la sala, un restaurante fantástico en Madrid."